Tras las consultas y talleres desarrollados en las zonas rurales de Europa, la Comisión Europea ha publicado los resultados de la Visión a Largo Plazo para las Zonas Rurales: por unas zonas rurales de la UE más fuertes, conectadas, resilientes y prósperas.
ADISMONTA organizó el pasado 25 de enero de 2021 su Taller a Largo Plazo para la comarca Sierra de Montánchez y Tamuja. Desde el lanzamiento en julio de 2020 de la hoja de ruta de la U.E, abierta a comentarios hasta el 9 de septiembre de 2020, se han recibido 1326 respuesta en la Consulta Pública Online (del 7 al 30 de noviembre de 2020) y se han realizado, en enero de 2021, 166 talleres (uno de ellos el organizado por ADISMONTA, único en Extremadura, cuyos resultados fueron enviados a la U.E., y luego publicados, por la Red Rural Nacional), con 2900 participantes. Además, la U.E. ha organizado, del 22 al 26 de marzo de 2021, la Semana de la Visión Rural, con 1365 participantes, y ha realizado más de 25.800 encuestas, denominadas del Eurobarómetro.
Fruto de todo ello, la Comisión Europea ha publicado la Comunicación visión a largo plazo para las zonas rurales de la UE, en la que se indican los retos y problemas a los que se enfrentan y se hace hincapié en algunas de las oportunidades más prometedoras de que disponen estas regiones. Sobre la base de previsiones y amplias consultas con los ciudadanos y otros interlocutores de las zonas rurales, la visión presentada propone un Pacto Rural y un Plan de Acción Rural, con el objetivo de hacer que nuestras zonas rurales sean más fuertes, resilientes y prósperas, y estén conectadas.
Las zonas rurales de la UE son una parte fundamental del modo de vida europeo. En ellas viven 137 millones de personas que representan casi el 30% de su población y más del 80% de su territorio, considerando todos los municipios de Europa con bajo tamaño o densidad de población. Como ha subrayado la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, “Europa no estaría completa sin su campo”
Nuestras zonas rurales son el tejido de nuestra sociedad y el latido de nuestra economía. La diversidad del paisaje, la cultura y el patrimonio es uno de los rasgos más definitorios y notables de Europa. Son una parte fundamental de nuestra identidad y de nuestro potencial económico”. “Vamos a valorar y preservar nuestras zonas rurales y a invertir en su futuro”.
Presidenta von der Leyen – julio de 2019 (Directrices políticas para 2019-2024)
Cada vez se entiende mejor que el papel y la importancia de las zonas rurales están infravalorados y no se recompensan suficientemente. La Comunicación sobre una visión a largo plazo para las zonas rurales de la UE pretende abordar estos retos y preocupaciones, aprovechando las nuevas oportunidades de las transiciones ecológica y digital de la UE y las lecciones aprendidas de la pandemia de COVID 19, y determinando los medios para mejorar la calidad de vida rural, lograr un desarrollo territorial equilibrado y estimular el crecimiento económico en las zonas rurales junto con la ayuda de la europea.
Las zonas rurales son actores activos en las transiciones verde y digital de la UE. A través de la producción sostenible de alimentos, la preservación de la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático, desempeñan un papel clave en la consecución de los objetivos de la Unión Europea en materia de “Green Deal ” , “Farm to Fork ” y biodiversidad. Paralelamente, el despliegue de las nuevas tecnologías en las zonas rurales será indispensable para hacer realidad la Agenda Digital de Europa. Alcanzar los objetivos de las ambiciones digitales de la UE para 2030 también puede ofrecer más oportunidades para el desarrollo sostenible de las zonas rurales más allá de la agricultura, la ganadería y la silvicultura. Puede contribuir a desarrollar nuevas perspectivas para el crecimiento y la distribución geográfica de la industria manufacturera y, especialmente, de los servicios.
Los cambios en la sociedad, incluidos los últimos provocados por el COVID-19, deben convertirse en oportunidades para las zonas rurales. Debemos evitar una recuperación asimétrica y garantizar que todos los territorios de la UE tengan los medios para recuperarse por igual de la pandemia.
La Comisión Europea, en consonancia con su firme compromiso con la democracia y la igualdad, y consciente del impacto del cambio demográfico, se ha comprometido a no dejar a nadie ni a ningún lugar atrás y a acercar la UE a sus ciudadanos
Para aprovechar al máximo el potencial de las zonas rurales es necesario un desarrollo territorial equilibrado, anclado en enfoques basados en el lugar y en la participación de todos los niveles de gobernanza, tal como se indica en la nueva Agenda Territorial de la UE, recientemente adoptada.
Para afrontar con éxito los grandes retos y tendencias consecuencia de la mundialización, la urbanización y el envejecimiento, y aprovechar las ventajas de las transiciones ecológica y digital, se necesitan políticas y medidas adaptadas localmente que tengan en cuenta la diversidad de los territorios de la UE, sus necesidades específicas y sus puntos fuertes relativos.
En las zonas rurales de toda la UE, la población es, por término medio, de mayor edad que en las zonas urbanas, y empezará lentamente a disminuir en la próxima década. Esto, sumado a la falta de conectividad, el subdesarrollo de las infraestructuras, la falta de oportunidades de empleo y el acceso limitado a los servicios, hace que las zonas rurales resulten menos atractivas para vivir y trabajar. Al mismo tiempo, estas zonas desempeñan también un papel activo en las transiciones ecologica y digital de la UE. Alcanzar los objetivos de las ambiciones digitales de la UE para 2030 puede brindar más oportunidades para el desarrollo sostenible de las zonas rurales más allá de la agricultura, la ganadería y la silvicultura, al crear nuevas perspectivas para el crecimiento de la industria manufacturera y, especialmente, de los servicios, y al contribuir a un mejor reparto geográfico de los servicios y las industrias.
Esta visión a largo plazo para las zonas rurales de la UE tiene por objeto abordar esos retos y problemas, basándose en las nuevas oportunidades brindadas por las transiciones ecológica y digital de la UE y en las enseñanzas extraídas de la pandemia de COVID-19, y determinando los medios para mejorar la calidad de vida rural, alcanzar un desarrollo territorial equilibrado y estimular el crecimiento económico.
Una Visión de las Zonas Rurales hacia 2040
Los retos y las oportunidades a los que se enfrentan las zonas rurales, varios de los cuales es probable que continúen en el futuro, son la base del ejercicio realizado para definir la Visión. Los ciudadanos y las organizaciones de las zonas rurales participaron intensamente en el diseño de esta Visión que describe dónde quieren estar las zonas rurales en 2040. Además, se llevó a cabo un ejercicio de prospectiva específico. En él se consideraron las megatendencias que impulsan las transformaciones hasta 2040 y se identificaron los factores clave de cambio subyacentes, los denominados “motores“, que se espera que configuren el futuro de las zonas rurales (véase más abajo el gráfico 1). La demografía y la gobernanza se destacaron como los motores más impactantes e inciertos y fueron los ejes sobre los que se desarrollaron cuatro escenarios. Cada uno de ellos ilustra un posible futuro para las zonas rurales en 2040, dependiendo de si atraen o no a nuevos habitantes y de la calidad de la gobernanza a varios niveles. Los escenarios también abordan las interdependencias entre las zonas rurales y las urbanas.
Sobre la base de los motores identificados, los escenarios y las numerosas actividades de consulta, surgieron cuatro áreas de acción complementarias, que encarnan una visión a largo plazo de, por y para zonas rurales más fuertes, conectadas, resilientes y prósperas para 2040.
Fortalecimiento de las Zonas Rurales
La innovación en las zonas rurales no está dirigida por las grandes empresas. Está dirigida por la comunidad”.
De “habitantes rurales” a comunidades rurales. Todos invitados, todos implicados”.
(Actividades de consulta para la Visión a largo plazo)
Las zonas rurales deberían albergar comunidades locales empoderadas y dinámicas. Permitir que todas las personas participen activamente en los procesos de elaboración de políticas y de toma de decisiones, con la participación de un amplio abanico de partes interesadas y redes, así como de todos los niveles de gobernanza, es clave para desarrollar soluciones políticas e inversiones a medida, basadas en el lugar y de forma integrada.
Se necesitan zonas rurales más fuertes: se dará prioridad a capacitar a las comunidades rurales, mejorar su acceso a los servicios y facilitar la innovación social.
Zonas Rurales Conectadas
El campo sigue luchando con numerosos puntos blancos en cuanto a infraestructuras: carreteras, transporte, alcantarillado y suministro de agua”.
La banda ancha debe ser un servicio esencial. Es un medio para un fin, no el fin en sí mismo”.
(Actividades de consulta para la Visión a largo plazo)
Conectadas: se mejorará la conectividad tanto en términos de transporte como de acceso digital
El desarrollo de las zonas rurales depende de que estén bien conectadas entre sí y con las zonas periurbanas y urbanas. Esto facilita su acceso y mejora el acceso de las comunidades locales a una gama más amplia de servicios.
La infraestructura digital es un factor esencial para que las zonas rurales contribuyan a la transición digital y la aprovechen al máximo. El desarrollo de las capacidades digitales en las zonas rurales mejorará su atractivo. Las tecnologías digitales ofrecerán servicios como sistemas de transporte inteligente multimodal, asistencia rápida de emergencia en caso de accidente, soluciones de gestión de residuos más específicas, soluciones inteligentes de energía e iluminación, optimización de recursos, etc.
Zonas rurales resistentes que fomentan el bienestar
La visión debe promover la resiliencia sostenible y el desarrollo inclusivo, y mejorar el bienestar de los habitantes”.
(Actividades de consulta para la Visión a largo plazo)
Resilientes: se preservarán los recursos naturales y se ecologizarán las actividades agrícolas para luchar contra el cambio climático, sin olvidar la resiliencia social, para lo cual se ofrecerán cursos de formación y diversas oportunidades de empleo de calidad.
Las zonas rurales pueden y deben desempeñar un papel central en el “Green Deal” europeo. La preservación de los recursos naturales, la restauración de los paisajes, incluidos los culturales, la ecologización de las actividades agrícolas y el acortamiento de las cadenas de suministro harán que las zonas rurales sean más resistentes al cambio climático, a los riesgos naturales y a las crisis económicas.
Zonas Rurales prósperas
‘Continuar con el compromiso de apoyar la diversificación de actividades y funciones de las zonas rurales, aprovechando las fortalezas, conocimientos y oportunidades locales y proporcionando un mayor apoyo a los proyectos de pequeña y micro escala, especialmente promovidos por los jóvenes y los desempleados, evitando su marcha a las ciudades’.
(Actividades de consulta para la Visión a largo plazo)
Prósperas: se diversificarán las actividades económicas y se mejorará el valor añadido de la agricultura, las actividades agroalimentarias y el agroturismo.
Las zonas rurales pueden ser más prósperas si se diversifican las actividades económicas hacia nuevos sectores con efectos positivos en el empleo35 y se mejora el valor añadido de las actividades agrícolas y agroalimentarias.
La diversificación de las actividades económicas debe basarse en estrategias económicas locales sostenibles que incluyan medidas que hagan su entorno atractivo para las empresas. La diversificación económica también requiere dar acceso a la educación y formación digital e híbrida para que las comunidades adquieran nuevas habilidades y apoyen la mentalidad empresarial.
El Pacto Rural y el Plan de Acción Rural de la Unión Europea
Un Pacto Rural y un Plan de Acción Rural de la UE con proyectos emblemáticos tangibles y nuevas herramientas ayudarán a alcanzar los objetivos de la Visión. Impulsarán la revitalización de las zonas rurales, mitigarán el impacto de las tendencias negativas y permitirán el seguimiento y la presentación de informes sobre los logros hacia 2040.
La Comisión apoyará y supervisará la ejecución del Plan de Acción Rural de la UE y lo actualizará periódicamente para velar por que siga siendo pertinente. También seguirá colaborando con los Estados miembros y los interlocutores rurales para mantener un diálogo sobre cuestiones rurales. Además, se pondrá en marcha un proceso de «comprobación del efecto local» mediante el cual las políticas de la UE se examinarán desde una perspectiva rural. Se tratará de determinar y tener mejor en cuenta el posible efecto e incidencia de una iniciativa política de la Comisión sobre el empleo, el crecimiento y el desarrollo sostenible rurales.
Por último, se creará un observatorio rural dentro de la Comisión para seguir mejorando la recogida y el análisis de información acerca de las zonas rurales. Así se conseguirá documentación para fundamentar la formulación de políticas en materia de desarrollo rural y sostener la ejecución del Plan de Acción Rural.
Siguientes etapas
El anuncio de hoy de la visión a largo plazo para las zonas rurales constituye el primer paso hacia unas zonas rurales más fuertes, mejor conectadas, resilientes y prósperas de aquí a 2040. El Pacto Rural y el Plan de Acción Rural de la UE serán los componentes clave para alcanzar esos objetivos.
De aquí a finales de 2021, la Comisión se coordinará con el Comité de las Regiones para estudiar las vías hacia los objetivos de la visión. A mediados de 2023, la Comisión hará balance de las medidas financiadas por la UE y los Estados miembros que se hayan llevado a cabo y programado para las zonas rurales. Un informe público, que se publicará a principios de 2024, determinará los ámbitos en los que es necesario mejorar el apoyo y las finanzas, así como el camino a seguir, sobre la base del Plan de Acción Rural de la UE. Los debates en torno al informe contribuirán a la reflexión sobre la preparación de las propuestas para el período de programación 2028-2034.
Fuente: REDR y COMMUNICATION FROM THE COMMISSION TO THE EUROPEAN PARLIAMENT, THE COUNCIL, THE EUROPEAN ECONOMIC AND SOCIAL COMMITTEE AND THE COMMITTEE OF THE REGIONS A long-term Vision for the EU’s Rural Areas – Towards stronger, connected, resilient and prosperous rural areas by 2040 (Traducción no oficial al castellano)
