Montánchez, Opinión

Bodegas: Historia de un pueblo

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Dicen que el patrimonio forja nuestra identidad. No hacen falta grandes monumentos para reconstruir una historia. Ejemplo claro son las bodegas de los pueblos, antes llenas de actividad; ahora sumidas en el olvido y en el peor de los casos en la desaparición.

Municipios como Montánchez atesoran una tradición bodeguera tradicional muy importante. Rara es la casa que no cuenta con una dependencia dedicada a los conos y tinajas. Los mayores todavía recuerdan el olor a pajuela, la uva pisada con los pies en el suelo o el sonido del estrujón. Era una forma de vida relacionada con su agricultura, con las viñas, pegada a la tierra.

Bodegas en los sótanos de las viviendas, clara señal de la relevancia que tenían para las familias. La mayoría llevan más de 50 años cerradas, desde que se creó la cooperativa a principios de 1971.

Ahora todo eso cae en el olvido. Bodegas reconvertidas en otra habitación más… conos sacados de allí y malvendidos o hechos trizas a golpe de marras.

¿Cómo revertir esta situación? Difícil. Estamos hablando de propiedades privadas. Pero no imposible.

Concurso de ideas, talleres infantiles para explicar cómo se hacía el vino en las casas, estudio detallado de las bodegas que todavía quedan intactas, exposiciones, jornadas de puertas abiertas… son ejemplos para recuperar nuestro pasado. También para ofrecer otro reclamo turístico más al viajero.

Montánchez tiene su castillo, sus jamones y su paisaje. También sus bodegas. Hasta allí llegaban las tinajas hechas en pueblos cercanos como Torre de Santa María, Arroyomolinos de  Montánchez o Valdefuentes.

La tradición de hacer vino en la vivienda se ha perdido y no volverá jamás. Por los olores, por la suciedad, por la complicación, porque todo se compra ya a golpe de clik… por todo eso y mucho más pocos pisarán ya la uva en su casa, poco vino fermentará en los conos. Eso se ha perdido, adiós al contenido. No echemos a perder también el continente, el recinto que encierra tanta historia. Las bodegas son nuestro pasado. Es nuestra historia.